LA IMPORTANCIA EN LA TOMA DE DECISIONES.

Reza una de mis frases favoritas, “Elige una meta y persíguela hasta el final”. Siempre he creído que ésta es una de las más hermosas y ciertas frases que un ser humano ha escrito y ha regalado al resto de la humanidad. Y lo primero que se puede leer en esta frase es la palabra Elige. Y es justamente esto lo que nos lleva al tema de la Toma de Decisiones.

            Pero, ¿Por qué está ligada directamente la palabra “Elegir” con la “Toma de Decisiones”? De acuerdo a la Real Academia de la Lengua Española; la palabra Elegir, es por definición: “Preferir a alguien o algo para un fin”.

En todas y cada una de las etapas de la vida del ser humano, estamos obligados a tomar decisiones; desde si lloramos al ser bebés para obtener lo que buscamos, ya sea la atención de nuestros padres, un juguete, comida o si nos quedamos apacibles en la espera de que esto suceda, hasta la persona con la cual decidimos pasar el resto de nuestras vidas.

            En la naturaleza del mundo; contamos con la maravilla del fenómeno de la dualidad; lo cual nos hace precisamente elegir entre, por ejemplo; lo bueno y lo malo, lo negro y lo blanco, lo triste y lo alegre, etcétera. En todo momento encontramos disyuntivas en las cuales debemos decidir entre por lo menos 2 opciones, las cuales, dependiendo el camino que elijamos, nos guiarán a futuros diferentes y para algunos, inclusive, universos “paralelos”; donde nuestros otros “yo’s” viven, más o menos felices que nosotros; dependiendo la decisión que hayamos tomado en cualquiera que sea un momento clave de nuestras vidas.

            Los seres humanos tenemos la capacidad de analizar las consecuencias de cada uno de nuestros actos, con la finalidad de aprovechar al máximo las oportunidades que nos brinda la vida, ya sea en el ámbito profesional, personal, familiar, individual o afectivo (por nombrar algunos ejemplos); sin embargo, no todos nos dedicamos a llevar en práctica esta habilidad. Inclusive, nos es sumamente complicado el llegar a entender que debemos hacernos responsables por nuestros actos y que éstos recaen no solamente en nosotros, sino también en las vidas de quienes nos rodean. De ahí la importancia de tomar conciencia sobre la toma de decisiones, comprendiendo que nuestras acciones no afectan solamente nuestras propias vidas, sino las vidas de nuestro entorno en general. Por ejemplo, decidir la educación de nuestros hijos, para que el día de mañana sean personas de bien que busquen el bienestar de su comunidad y no personas que se dediquen a buscar un bien personal sin importarles lo que pueda afectarle a los demás.

            Los seres humanos somos también egoístas por naturaleza; pero debemos recordar que así como estamos llenos de defectos, estamos llenos de virtudes; y es nuestro deber en el día a día encausarnos a nosotros mismos y a quienes nos rodean para conseguir el mayor logro en la vida, la felicidad plena; conocernos a nosotros mismos, conocer las dimensiones de la humanidad y ser plenos. Recordemos que la felicidad y el éxito siempre van de la mano pero no quiere decir que uno de estos conceptos asegure al otro. Por ello, la frase del inicio me parece tan bella y especial: si el bien máximo es esa plenitud, debemos buscar elegir el mejor camino para conseguirla y no permitir que nada nos detenga en el camino a esta meta.

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